La Verdad

Si San Pedro tuviera alcalde

Por:

Ismael Guerra De La Ossa.                        

La Verdad. //

En el Plan 5 Caribe, no que espontáneamente se ideó Electricaribe sino que se lo impuso el gobierno a través de la Superintendencia de Servicios Públicos Domiciliarios con el objeto de mejorar el servicio de energía en la Costa Caribe cuyo costo es de 1,1 billones de pesos, se le asignaron a Sucre para este año 12 mil millones de pesos que se destinarán prioritariamente a la ejecución de varias obras, entre ellas la construcción de una subestación eléctrica en San Pedro.

Revive así un viejo proyecto que surgió hace varios años con la intención de  solucionar el problema de la prestación del servicio de luz en nuestro municipio el cual data, ciertamente, de hace lustros durante los cuales los sampedrenses han tenido que soportar estoicamente las incomodidades, angustias y desesperación que les acarrean los apagones a cualquier hora del día o de la noche y las suspensiones prolongadas y no comunicadas en un servicio tan esencial para el discurrir vital de las comunidades, amén de las pérdidas económicas que experimentan las familias y particularmente los comerciantes de alimentos perecederos los cuales se les dañan por falta de refrigeración. Es el momento entonces de que las fuerzas vivas de la población se pellizquen y se pongan al frente de una cruza-da con el propósito de que la construcción de esta subestación no se embolate otra vez y por el contrario sea una realidad lo más pronto posible.

Las juntas de acción comunal, los comités cívicos, las organizaciones estudiantiles y comunitarias, las agremiaciones, cooperativas y en general todos los estamentos de la localidad, deberían declararse en pie de lucha para que Electricaribe cumpla esta exigencia gubernamental pero con celeridad y prontitud pues no son de poca monta los perjuicios que está recibiendo San Pedro a raíz del pésimo servicio de energía eléctrica que está soportando y que, a decir, verdad, cada día se torna peor. Por supuesto, al Concejo le corresponde liderar una campaña de esta naturaleza. Sabemos que a este cuerpo colegiado no le ha sido indiferente esta dramática situación y ha actuado, pero hay que ser más incisivos y persistentes ante la gravedad del caso.

Naturalmente, si San Pedro tuviese alcalde sería a este funcionario a quien le correspondería liderar la iniciativa en este sentido y ponerse al frente de una campaña con denuedo y empeño, a objeto de abogar por que la referida subestación sea una realidad en corto tiempo y no se vaya a quedar solo en el papel, o sea en letra muerta. Pero, desafortunadamente, a la cabeza de la administración municipal no hay un verdadero ejecutor de políticas públicas sino un contratista con fundaciones foráneas cuestionadas, en busca de intereses personales y subalternos.