LA VIDA. VALOR MAXIMO Y ABSOLUTO

miércoles 0 comentarios


Por Ángel H. Solorzano Álvarez
Redactor La Verdad

El pensamiento humano se ha preocupado por el origen de la vida desde tiempos inmemoriales en los distintos niveles del desarrollo cultural de la sociedad dando diversas explicaciones, originándose ideológicamente las corrientes filosóficas materialismo e idealismo pero ¿Qué es la vida? ¿Es de naturaleza material? Como todo el resto del mundo, o su esencia se halla en un principio espiritual?, interrogantes estos que merecen una discusión de altura, ahora no, será en otra ocasión, solamente recordemos que fueron abordados por Platón, Basilio de Cesárea, San Agustín, Tomás de Aquino, Demetrio, C. Darwin, K. Timiarázev, Kovalesenky, F. Engels, Stalin, Oparin, Vezelov y muchos más.


Es esencial, primero, comprender que la sociedad constituye un sistema de vida que no podemos poner en peligro si no queremos sucumbir en él. Pues, entre nosotros se destruye una vida casi con la misma tranquilidad con que se tala un árbol o se sacrifica un animal. Las leyes sociales se violan con el mismo espíritu oportunista con que se violan las leyes biológicas de los Ecosistemas. Los valores de convivencia están en crisis. Hay que devolver el valor a la vida.

Paradójicamente, el hombre atenta contra la vida misma en su deseo de mantener la supervivencia. Dentro de esta perspectiva, hay casos en los cuales la vida de determinadas personas se extermina en aras de la vida de otros, esto no es justificación para que una especie inferior pueda ser aniquilada arbitrariamente por otra superior. Las diferentes formas de vida están ligadas entre sí por cadenas de beneficios mutuos. Ninguna especie es autosuficiente. Todas son interdependientes. Si destruimos un elemento de un ecosistema, la fuerza vital de éste se debilita y puede incluso llegar a deteriorarse con el tiempo. Las regiones desérticas y semidesérticas de nuestro planeta son ejemplo. La vida en sus múltiples manifestaciones conforma una estructura  o un sistema en el que todas sus partes son solidarias, teniendo como resultado del funcionamiento: la vida.

Podemos afirmar, en resúmen, que la vida se constituye en el valor primordial de la naturaleza. Además de ocupar el puesto más elevado en la escala de los valores, la vida es el único valor absoluto. Cualquier otro valor es relativo: El amor, la libertad, la sabiduría.

REFLEXIÓN:
ü  “Reafirmando los propósitos fundamentales de las Naciones Unidas, la Asamblea General (Estocolmo 1972) promulgó la Carta Mundial de la Naturaleza: convencida de que:
ü  “Toda forma de vida es única y merece ser respetada, cualquiera que sea su utilidad para el hombre, y con el fin de reconocer a los demás seres vivos su valor intrínseco, el hombre ha de guiarse por un código de acción moral”.

0 comentarios:

Publicar un comentario

 

©Copyright 2011 La Verdad | TNB