Por:
WILBER FLÓREZ RAMÍREZ
Director La Verdad.//
La corrupción es uno de los problemas más
grandes a nivel social que tiene nuestro país.
Quienes están en el
poder, sólo se dedican a tomar los
recursos, vengan de donde vengan, sin importar si van destinados a la
educación, cultura, infraestructura, bienestar, tercera edad; etc.
Ellos solo piensan en el
bien personal, no en el bien común. La administración municipal local, no es la
excepción. Por eso, se dice que los políticos, incluyendo los alcaldes,
-algunos no todos- son calificados como bárbaros, ya que apoderarse de un
dinero para BIENESTAR SOCIAL sin
pensar en los desplazados por la violencia o en las necesidades de los menos
favorecidos, es un acto inhumano sin precedentes, se debe ser muy duro de corazón para comprar uno o varios vehículos
de lujo o de alta gama que trabajar por el BIEN SOCIAL.
En Colombia no es un
secreto que los jóvenes tienen una gran
apatía política por los altos índices de corrupción social, en todos los
frentes, que ven a diario a través de los noticieros.
El panorama es sombrío y
estamos casi seguro que la política Colombiana terminará convirtiéndose en un
nido de corrupción, muy a pesar de las políticas anticorrupción que ponen en marcha los
gobernantes de turno.
Actualmente, el tema de la corrupción está presente
y es motivo de conversación en todas las esquinas y rincones de Colombia.
En nuestro pueblo la corrupción galopa
aceleradamente
día a día. Es común que aparezcan noticias sobre corrupción administrativa en
este pueblo de Dios y muchas de ellas se convierten en verdaderos sucesos.
Por algo el término CORRUPCIÓN significa putrefacción. En un artículo de Oscar Pardo
Ramos sobre corrupción, encontré algunas definiciones que me llamaron
poderosamente la atención y que resumen al máximo el significado de éste.
“Corrupción es el comportamiento que se desvía de las funciones naturales del cargo público para
atender intereses privados (familia,
círculo de amigos), obtener ganancias pecuniarias o posición social, o
violar las reglas en aras de oponerse al ejercicio de algunos tipos de
influencia privada”.
“La corrupción se
describe como toda aquella acción u omisión del servidor público que lo lleva a
desviarse de los deberes formales de su cargo con el objeto de obtener
beneficios”. Lo que quiere decir, que este flagelo está lejos de desaparecer.
0 comentarios:
Publicar un comentario